El diario El Tiempo publicó el 2 de diciembre un artículo del Embajador de China en Colombia Li Nianping sobre el segundo Documento sobre la Política hacia América Latina y el Caribe, cuyo texto completo es lo siguiente:

A pesar de la larga distancia que separa a China y a los países latinoamericanos y del caribe, los lazos de amistad datan de muchos años atrás. Ambas partes conceden alta importancia en el desarrollo de las relaciones y brindan apoyo y respeto recíprocos en temas concernientes a la soberanía nacional, la integridad territorial, el camino de desarrollo etc. Se consideran el uno al otro oportunidades y socios para su respectivo desarrollo, al tiempo que ambos apuestan y promueven la democratización de las relaciones internacionales. Están íntimamente conectados los pueblos de ambas partes y existe una cercanía innata entre China y América Latina.

Durante los últimos años, el desarrollo de las relaciones entre China y América Latina ha dado un gran salto. El Presidente chino Xi Jinping realizó tres visitas a países latinoamericanos y el Primer Ministro Li Keqiang, dos veces ha pisado la tierra latinoamericana, lo cual constata la prioridad que da el Gobierno Chino para los países de América Latina y el Caribe. Mandatarios de varios países de América Latina realizaron visitas a China. Hasta la fecha, China ha establecido Asociación Estratégica Integral o Asociación Estratégica con 8 países latinoamericanos. En el año 2014, se llevó a cabo la primera reunión colectiva entre el Presidente Xi Jinping con dirigentes de países de América Latina y el Caribe, logrando definir la Asociación de Cooperación Integral Chino-latinoamericana con características de beneficio mutuo, equidad y desarrollo común. También se acordaron por unanimidad establecer el Foro China-CELAC, mecanismo que tuvo su primera conferencia de nivel ministerial en enero de 2015, abriendo desde ese instante la nueva etapa de cooperación integral entre China y América Latina.

China y América Latina se han convertido en importantes socios de cooperación económica y comercial. El Presidente Xi Jinping y el Primer Ministro Li Keqiang, en sus visitas a América Latina, propusieron sucesivamente el nuevo Marco de Cooperación Pragmática de ¨1+3+6¨ ( ¨1¨ se refiere al ¨Programa de Cooperación 2015-2019 entre China y países de América Latina y el Caribe¨, con miras a realizar crecimiento inclusivo y un desarrollo sostenible. ¨3¨ se refiere a ¨tres motores¨, compuesto por el comercio, la inversión y la cooperación financiera, mediante los cuales procuran un desarrollo comprensivo de la cooperación pragmática entre ambas partes. ¨6¨ se refiere a ¨seis áreas¨, que son recursos y energía, construcción de infraestructura, agricultura, industria manufacturera, ciencia tecnología e innovación y tecnología informática, terrenos prioritarios para acoplar las industrias chinas y latinoamericanas) y la nueva modalidad de Cooperación de Capacidad Productiva ¨3x3¨ (en primer lugar, para atender mejor las necesidades de los países latinoamericanos, construir conjuntamente tres corredores que son el logístico, el eléctrico y el informático, a fin de materializar la interconectividad del continente suramericano; en segundo lugar, siguiendo las reglas de la economía de mercado, efectuar la cooperación con una interacción benigna entre el triángulo del sector empresarial, la sociedad y el gobierno; en tercer lugar, enfocándose en los proyectos cooperativos entre China y América Latina, ampliar las formas de financiación de fondos, créditos y seguros). Gracias al respaldo por los gobiernos de ambas partes y la activa participación de las empresas, se ha visto un desarrollo económico y comercial galopante. China se ha mantenido durante muchos años en el segundo mayor socio comercial de América Latina, y se ha tornado en el mayor socio para muchos países latinoamericanos. En el año 2015, el monto total de los comercios entre China y América Latina alcanzó 236.5 mil millones de dólares. América Latina ya es el segundo destino de inversiones chinas después de Asia. Hasta el momento, las inversiones directas provenientes de China para América Latina ha superado 150 mil millones de dólares. La cooperación mutuamente beneficiosa en ámbitos como comercio, agricultura, energía, infraestructura, finanzas, y telecomunicaciones ha generado bienestar palpable para ambas poblaciones.

En el año 2008, se publicó el primer Documento de la Política China hacia América Latina y El Caribe. Después de 8 años de esfuerzos unidos, las metas fijadas en dicho documento prácticamente se han realizado. En la actualidad, China y los países latinoamericanos se enfrentan a nuevas posibilidades y nuevos retos, también se ubican en una etapa crucial para su desarrollo. Bajo este contexto, el Gobierno Chino ha presentado el día 24 de noviembre el segundo Documento de la Política hacia América Latina y el Caribe (descárgalo en la página web http://co.china-embassy.org/esp/sghd/t1418548.htm), estableciendo el objetivo general del desarrollo de las relaciones sino-latinoamericanas como buscar confianza mutua y sinceridad en lo político, cooperación y ganancia compartida en lo económico y comercial, aprendizaje recíproco en lo cultural y humanístico, colaboración estrecha en los asuntos internacionales, fortaleciendo las relaciones bilaterales e integrales al mismo tiempo. Asimismo, queda en el documento radicada la propuesta de impulsar el programa integral de cooperación entre China y América Latina, con 8 áreas prioritarias y 39 planteamientos de cooperaciones determinados, en aras de llevar adelante las relaciones para el forjamiento de los dos lados como una comunidad de destino compartido, tomados de la mano. Este documento será el plan maestro de acciones para guiar el desarrollo completo para las relaciones entre China y América Latina bajo nuevas circunstancias. La parte china queda con mucha expectativa para el futuro de las relaciones.

Colombia es un país de peso en América Latina y viene desempeñando un rol muy positivo en los asuntos regionales e internacionales. La parte china presta suma importancia en desarrollar las relaciones con Colombia y se ha venido apoyando con firmeza el proceso de paz en Colombia, con disposición de tener un involucramiento dinámico en la reconstrucción posconflicto. Estoy convencido de que el segundo Documento de la Política China hacia América Latina y el Caribe impulsará a plena marcha las relaciones entre China y Colombia hacia adelante.